“Nomadland” está arrasando en la temporada de premios. Excelentemente dirigida por Chloe Zhao, conmovedoramente actuada por Frances McDormand (quizás su mejor papel en una ya muy galardonada carrera), todo parece estar construido a una escala “humana” de la cual es imposible pasar sin evocar alguna emoción o recuerdo. Parte fundamental en ello es la selección de música que realizó Chloe Zhao, que toma como base principalmente el trabajo del compositor italiano Ludovico Einaudi (de quien ya hemos hablado antes). Si bien “BSO magazine” siempre ha promovido comentar bandas sonoras originales, “Nomadland” será una excepción. Acá les comentamos por qué nos gusta tanto.
Oltremare / Ludovico Einaudi.
El primer tema musical en “Nomadland” es “Oltremare”, de Ludovico Einaudi. Original de su disco “Divenire” del año 2006, es quizás una de las piezas más famosas y reconocidas del compositor italiano. De 11 minutos de duración, Chloé Zhao captura totalmente su esencia en el viaje de Fern, un viaje personal pues tras la pérdida de todo lo que era su por entonces su vida (su marido, su trabajo al cerrar la planta donde trabajaban y su hogar), decide emprender viaje.
“Oltremare”, en italiano, quiere decir “más allá del mar”, en un claro viaje hacia lo exterior, lo desconocido. Precisamente lo que hace Fern. Y pese a que “Oltremare” viene también a aparecer cuando Fern vuelve a casa hacia el final de la película, las decisiones que vuelve a tomar nos ratifican la idea original. Fern se vuelve una nómade, y vuelve a Empire para despedirse. Porque todo viaje debe iniciarse cuando uno está realmente preparado, sin embargo no todas las despedidas son realmente finales.
Seven Days Walking: Day 1: Golden Butterflies / Ludovico Einaudi.
En 2019, Ludovico Einaudi lanzó “Seven Days Walking”, un increíble proyecto inspirado en sus caminatas diarias por los Alpes. Días nevados, donde seguía las mismas rutas y notaba los pequeños cambios en lo que observaba producto del paso del invierno, reflejándolo en su música. Por eso es un experimento que es totalmente sensorial. Parece una constante meditación del compositor de admiración por las diferencias con las que construye las versiones presentes en los 7 discos que forman la colección.
En “Nomadland”, “Seven Days Walking: Day 1: Golden Butterflies” aparece en una escena muy importante. Cuando Fern decide quedarse en la comunidad, camina por ella luego que le dan la bienvenida. Un largo plano secuencia donde solo vemos la excelente actuación de McDormand y escuchamos a Einaudi. El valor de caminar y meditar con ello, observar, valorar, pues de hecho Fern es invitada a integrarse a una serie de conversaciones que ella siempre rechaza: prefiere caminar. Por eso no es casualidad la elección musical de Zhao en este momento. Acá una clip de esa escena.
Epilogue / Ólafur Arnalds.
Si bien advertimos que esta columna sería una dedicada a Ludovico Einaudi, no podemos dejar de lado otro tema importante y realmente bello, que es “Epilogue” de Ólafur Arnalds. Dejaré que el mismo Arnalds les cuente la historia de “Epilogue”.

Quienes ya vieron “Nomadland”, saben que no es casualidad el nombre de la canción de Arnalds. Su primera aparición es precisamente en el epílogo de la vida de Swankie, quien le cuenta a Fern que tiene un cáncer ramificado del cual difícilmente puede escapra, por lo que su despedida, el epílogo de su vida, es un último viaje. Una escena muy emocionante porque ella necesitaba alguien que la escuche, porque cuenta en pocos segundos y en la intimidad con Dern, cosas tan importantes de su vida. Por supuesto, un tema tan minimalista como el Arnalds, basado en cuerdas y piano, da la intimidad necesaria tanto para las noticias tristes, como para las cosas buenas que surgen de ello (cuando “Epilogue” toma una nueva velocidad desde el 1:50).
Pero es quizás la segunda aparición de “Epilogue” la más emotiva. A otro nómade que ya había aparecido en su vida y acompañada de una fogata, Fern habla de la vida que nunca se desvanecerá ni perderá, recitando el soneto XVIII de Shakespeare.
“So long as men can breathe or eyes can ſee, So long lives this,and this gives life to thee”.
Mientras las personas respiren y los ojos puedan ver, vivirá este poema, que es en el fondo, la vida misma. Esta conversación, que le permite recordar los votos que hice al momento de casarse con el amor de su vida, es el empujón que necesitaba para volver a tomar la carretera.
Petricor / Ludovico Einaudi.
“Petricor” es una de mis favoritas del de Ludovico Einaudi, por lejos. Es el tema ancla de su proyecto “Elements” de 2015, que lo llevó al reconocimiento mundial y ser uno de los artistas con más ventas en Europa, incluyendo todos los géneros. Fue una reivindicación de la música clásica “modernizada” y todos quienes hayan escuchado “Petricor” antes de “Nomadland” lo entenderán fácilmente.
En “Nomadland” acomapaña el viaje en solitario de Fern tras dejar su comunidad, conectándose con la naturaleza y en el fondo liberándose (de vestimentas, apariencias, historias y lugares). ¿Por qué elige esta canción Zhao? Creo que la respuesta es simple. El preticor es el olor que deja la lluvia al caer sobre suelos secos. Es, en el fondo, una conexión con la tierra por vía del olfato y es lo que Fern logra a medida que avanza la película. Conectarse con su “yo” interior a través de sus viajes. Lástima que suena tan poco en la película, como podrán ver en la película.
La vida de “nómade” no es fácil. Menos cuando se decide empezar a vivirla. Hay soledad y por supuesto dudas. Creo que “Low Mist” refleja precisamente esas dudas, en especial en su primera aparición, pues acompaña a una Fern de cierta manera “tocada” por la presencia de Dave y de cierta manera, una respuesta a la invitación a cambiar que Dave le realiza. El rostro de Fern en toda esa secuencia de escenas es realmente conmovedor.
Sin embargo, “Low Mist” es el mismo tema con el que Fern decide “huir” de la casa de Dave. Un día lluvioso, con niebla, como la canción. “Dave” podrá ofrecerle muchas cosas, pero es un estilo de vida que no quiere, y por eso, actúa en consecuencia. Vuelve a Amazon, a su rutina, porque es dueña de la vida que quiere vivir. Otra celebración de año nuevo sola, nuevamente cruzar Estados Unidos siguiendo el buen clima. También una invitación no a reconstruir porque sí, sino que al hacerlo, hacernos cargo de nuestro pasado y nuestra historia, que es precisamente el legado de esta película. A honrarlo.
Así es la vida de un “nómade”. No hay una despedida final. De hecho con esa conversación y esa frase, vuelve a sonar “Low Mist”, convirtiéndose en el tema principal.