En la semana del estreno de “Dark Phoenix”, oportuno es recordar las bandas sonoras de las cintas de este nuevo grupo de X-Men, que comenzó hace largos 8 años con “First Class”, cuya banda sonora de Henry Jackman comentamos en su momento. Se trató de una banda sonora que fue capaz de partir de cero una franquicia que por entonces se veía agotada, aportando interesantísimos temas musicales en especial a los mutantes en su conjunto, al hecho de ser mutantes, y en especial, al personaje de Erik (aka Magneto). El renovado éxito de la franquicia continuó luego el 2014 con “Days of Future Past”, en una jugadísima apuesta de juntar a los elencos de las cintas de la década de lo 2000’s con los de hoy. La música también debió asumir esta desafío, primero, incorporando música de la trilogía anterior (decimos, la de Patrick Stewart e Ian McKellen), y luego ambientando su banda sonora en unos convulsionados 70’s y un distópico presente. ¿Pero qué harían con la notable música de Jackman? ¿Se acudiría a ella o simplemente quedaría en el olvido?
Marvel decidió retornar a Bryan Singer como director, y eso desde un inicio perfiló toda esta nueva producción, pasando por supuesto, por el encargado de la banda sonora, donde se dio paso a John Ottman. La decisión fue muy sorpresiva dado el éxito con que fue recibida la banda sonora de “First Class”, pero del todo lógica si consideramos el largo listado de cooperadores entre Singer y Ottman, que incluso tiene como antecedente “X2” en 2003. Con todo, la decisión en perspectiva se ve inentendible. Cuando Matthew Vaughn y Henry Jackman debiesen haber sido reconocidos, por el contrario, fueron ninguneados. No queda otra que interpretar este hecho como un acto totalmente voluntario de Singer y compañía, de volver a retomar el control de la franquicia en todos sus aspectos, lo que era simplemente necesario en el guión y quizás en lo visual, invitando a los X-Men viejos o la historia casi completa de Wolverine.
Singer y Ottman golpean de entrada, olvidándose del legado “First Class” y recuperando el tema de los X-Men incluso en un comienzo (“The Future – Main Titles”), que aunque bueno, parece injusto y con poco sentido de integridad entre las nuevas cintas, en especial porque el 90% de la historia sucede en la época de los X-Men jóvenes. Con todo, al menos son consecuentes en un sentido armónico, al cerrar la cinta, con el regreso de Logan luego de lograr, como menos esperaban, evitar la guerra del futuro, en “Welcome Back – End Titles”. En un comienzo, el tema de los X-Men es antecedido por un tema que habla de la urgencia del plan (y la oscuridad del momento), mientras que en la escena final, uno de logro y felicidad. Como cuando Logan ve a Jane y en su vista, aunque Cíclope también dispute su amor, encuentra su lugar de paz y tranquilidad
En los temas de acción, el trabajo de Ottman tiene bastante donde elegir. Primero aparece “Saigo – Logan Arrives”, cuando Mystique libera a los soldados mutantes en la guerra de Vietnam. O “Paris Pandemonium”, a propósito del conflicto suscitado en la firma del Tratado entre Vietman y Estados Unidos, algo que me obliga a premiar de nuevo a los pensadores tras “First Class”, quien se vuelven a apoyar (y bien) en un hecho histórico relevante para justificar su participación. Por supuesto, el climax es “The Attack Begins”, con Magneto invadiendo, con una magnitud inusitada (y que bien refleja la música desde un comienzo), la Casa Blanca y al Presidente de la República. Son temas, en general bien trabajados y desarrollados, con bastante identidad. Algo que a mi juicio, por ejemplo, no pasa con “Springing Erik”, un tema de escapatoria bastante estándar cuando un plan incluye elementos serios y de humor.
Ahora, si “First Class” fue potente en el tema musical de Magneto, que acá aparece de forma bastante clara en “Time’s Up (Film Version)”, siendo quizás la única referencia al trabajo de Jackman, esta película es potente en el tema de Xavier. Esto porque en el fondo, “Days of Future Past” es una película sobre Charles Xavier, de su caída y su renacer en el momento más oscuro. Y sucede algo muy curioso a propósito de tema de Xavier, llamado “Hope” por Ottman, y es que en la película es bastante poco utilizado, en desmedro del resto de la banda sonora. Si bien aparece en varios momentos sensibles de la película (desesperanzados buscando una solución en el futuro, luego cuando Logan lo visita y Beast le cuenta el por qué Xavier está tan depresivo -“He Lost Everything”-, o ya al final cuando se comunican los Xavier del presente y pasado), lo cierto es que su impacto es mucho más fuerte fuera de la cinta. Un tema muy sentimental que habla de los fracasos de Xavier, y en especial, de la esperanza que debe re-encontrar para poder vencer a este nuevo rival, que en el fondo, es él mismo. Este tema se apoya de forma muy clara en los actores. Es notable cómo la incorporación de Lawrence, Fassbender y McAvoy significó un alza en lo que a transmisión de emociones se refiere, quienes también son llevados de la mano de la mano por sus antecesores, Patrick Stewart e Ian McKellen. Mismo ejercicio que hace Xavier con el Xavier del futuro, quien lo acompaña como un padre le enseña a su hijo (a veces de manera directa, otras a través de Logan). Además de este tema 100% propio, la situación de Xavier también se refleja en su interacción con otros, y acá me gustaría destacar a “I Have Faith in Yoy – Goodbyes”, cuando busca, una vez más, ser un guía para Raven.
En suma, “Days of Future Past” presenta una interesante banda sonora, en especial evaluada en su contexto, donde salvo contadas excepciones, Marvel parecía no acertar tampoco en el Marvel Cinematic Universe. Si bien hubiésemos agradecido aprovechar más el legado de “First Class”, lo cierto es que Ottman fue capaz de crear un producto que funciona muy bien en pantalla, pese a poner quizá el 100% de sus cartas en el drama emotivo de Xavier. ¿Qué camino seguirá Zimmer con “Dark Phoenix”?
Un comentario en “John Ottman – X-Men: Days of Future Past (2014)”