Dado que “Captain Marvel” es la primera vez que una mujer tiene el rol protagónico en una cinta del MCU (quizás la gran deuda de Marvel, que no se atrevió nunca a hacer en el momento oportuno la cinta de Black Widow), no era coincidencia que su estreno se produjera tan cerca de un 8M que pasará a la historia por su masividad. Del mismo modo, tampoco es casualidad que sea la primera película de Marvel cuya compositora sea mujer. En cuanto a nombres, muchos otros hacían mayor sentido. En Hollywood, Lesley Barber o nuestra querida Mica Levi, y a nivel europeo, Anne Dudley recientemente. Esto sin contar la posibilidad de apostar por alguien de mayor renombre que todavía no se haya aventurado a componer su primer soundtrack. Pero la apuesta de Marvel fue por un nombre de menor conocimiento: Pinar Toprak, una compositora totalmente desconocida, y cuyo tema más reproducido en Spotify tenía apena 40.000 oyentes (superado el primer día en que estuvo disponible “Captain Marvel”), esto a pesar de tener cierto “nicho” por su trabajo en el videojuego Fortnite o “Krypton”, la serie precuela de Superman. Sin dudas acá Marvel quería dar un doble mensaje, pues “Captain Marvel” no sólo realzaba el lugar de las siempre postergadas mujeres, sino también al invitar a una compositora de origen turco, se daba también lugar y espacio a minorías -migrante, no occidental, etc.- (sin contar, por supuesto, el potente mensaje en cuanto a la orientación sexual de la Capitana).
La presencia de Pinar Toprak no es sino una prueba que Marvel estaba dispuesto a ir “all in” para mostrar que “Captain Marvel” era un proyecto que no sólo buscaba ser una buena película, sino una película que trascendiera por su mensaje. No olvidemos que luego de muchos vaivenes y sin sabores, podemos decir que el MCU había logrado finalmente dar en el clavo con su música. Desde “Spiderman: Homecoming” probablemente, pero en especial desde “Thor: Ragnarok” de Mark Mothersbaugh y recientemente “Black Panther” de Ludwig Goransson (ganadora del reciente Óscar a mejor banda sonora). En su momento dije que dichos trabajos habían revivido las bandas sonoras del MCU, cuando verdaderamente (y luego de discusiones descubrí) simplemente les habían dado valor, dado que hasta entonces, con excepciones probablemente, las bandas sonoras eran el último de los intereses de Marvel. Por lo mismo, uno hubiese esperado que otra etapa del cierre del MCU no fuese un momento de experimentar, y por el contrario, se viera como una oportunidad para incorporar a grandes compositores que en su momento dijeron no, pero que hoy estarían dispuestos a subirse al vagón, como sería un Zimmer, Desplat, o recuperar al mismo Elfman, por decir algunos. Pero no. Marvel no siguió el camino fácil y, por el contrario, optó por el difícil: creer en un proyecto, creer en una idea, y dar un salto de fe. ¿El resultado? Los invitamos a revisarlo.
Pinar Toprak tenía la difícil misión de crear algo en lo que ya existe mucho. En concreto, debía incorporar un tema musical al MCU para una nueva superhéroe que no participó hasta la 21va película (salvo una escena post-créditos), pero que venía a insertarse en un mundo musical al menos muy consolidado en sus ejes principales. Es, de cierta manera, libertad en la restricción. Y bueno, como todo superhéroe, también se trataba de un personaje que venía con un extenso background relativo a su personalidad, ampliamente desarrollado en los cómics. En esta materia, la primera apuesta de Toprak por una técnica muy reconocible desde un comienzo. “Captain Marvel”, el tema que abre el disco, tiene mucho de superhéroe en un comienzo, pero de inmediato da lugar a un acorde menor con una séptima (ver desde el minuto 1:00), lo que dota de “humanidad” o “tristeza” al tema principal de Vers. Algo que por supuesto, se terminará de aclarar con el transcurso de la película, pero que dice desde un comienza qué queremos transmitir con el tema de la Capitana Marvel y con quién queremos conectar (el público propio de ella, y el público más general del MCU). Y eso es quizás lo que le faltaba a muchos superhéroes del MCU. Una música que contraste el lado personal (el por qué se transformaron en héroes y los vacíos propios de su historia) con el heroico (donde todo anda, más o menos, bien), por lo que de entrada Toprak se gana puntos a favor, esto a pesar de no ser un tema pegajoso que quede grabado para siempre.
Ahora bien, si miramos el viaje de la música de “Captain Marvel” desde entonces, quizás el resultado no es tan alentador. Si bien Toprak supera con creces el desafío de musicalizar escenarios y culturas tan diversos (en especial la música que dedica a los Kree, que es muy limpia y moderna y refleja la intensidad y rigor de sus fuerzas militares, como se puede escuchar en “Let’s Bring Him Home o “Space Turbulence”), lo cierto es que el resto del disco carece de identidad. Así, la banda sonora termina siendo, como me dijo un amigo, muy genérica y poco memorable, y de hecho, en su principal escena de acción decide acudir a material de culto de la época de los 90’s, referencia que pensamos no sería reutilizada por otra cinta de Marvel. Hablamos de “Just a Girl” de No Doubt, que contiene un potente discurso feminista coincidente cronológicamente con la historia. Y no está mal que la cinta tenga ciertas referencias culturales, en especial discursivas, que la ambienten y apoyen. Lo que está mal es que se acuda a ellas renunciando entonces al proceso creativo del compositor musical. Así, por ejemplo, no tengo problemas que la música encuentre su espacio en escenas de viaje donde se presenta como el “soundtrack de la historia” (No Doubt en la radio), pero sí cuando reemplaza totalmente a la banda sonora en una escena en que hubiese preferido ver con todas luces a otra mujer, Pinar Toprak. De cierta manera, el legado de No Doubt no crece con esto, y por el contrario, se le cierran puertas a una nueva protagonista.
Con todo, “Captain Marvel” debe valorarse no solo con criterios objetivos en cuanto a su resultado, sino en cuanto al mensaje final que entrega. Y en eso, es una gran película. No puedo evitar acordarme de un increíble meme que circulo a propósito del estreno de “Wonder Woman”, donde una pequeña niña, disfrazada de su superhéroe favorito, en llanto pedía un autógrafo a Gal Gadot. El meme decía algo como “por eso es importante hacer películas con personajes principales femeninos”. Porque empoderan y cambian la concepción de lo que es un superhéroe (siempre relacionado a una figura masculina) a una nueva generación. “Captain Marvel” sigue esa línea, y la incorporación de Pinar Toprak la profundiza. Hollywood tiene la principal culpa de no abrir espacio a mujeres en lo que a bandas sonoras se refiere, y entregar a Toprak la composición de un soundtrack para una película de US$ 150 millones de presupuesto es un avance en sí mismo. En tal sentido, el resultado, independiente de críticas o mejores, será siempre una victoria. Tal como Vers, las mujeres se liberan, y qué mejor que hacerlo escuchando “Breaking Free”, de una compositora esperamos, marque un cambio que llegó para quedarse.